El tare es una salsa fundamental en la preparación del ramen, el famoso plato de fideos japonés que tantos aman. Piensa en ella como la salsa secreta que dota al ramen de su carácter irrepetible. En este artículo quiero detallar la teoría del tare que utilizaré en mis próximas recetas.
En el ámbito culinario, el tare es mucho más que una salsa. Es el custodio de los secretos del ramen, capaz de convertir un cuenco corriente en una experiencia memorable. Muchos maestros del ramen guardan su fórmula de tare como un tesoro: la elaboran en secreto para proteger su identidad.
El tare es tan complejo como versátil. Contribuye con tres elementos esenciales al ramen, que veremos a continuación:
- La salinidad, imprescindible para equilibrar y realzar los sabores
- El sabor, que aporta profundidad y complejidad.
- El umami, ese quinto sabor que aporta una riqueza indescriptible.
Sin embargo, el tare no se limita a estos tres aspectos. Actúa como el hilo conductor que enlaza todos los componentes del ramen, y logra una armonía de sabores tan sutil como poderosa.
La palabra clave: flexibilidad
En una ramen-ya, el tare desbloquea una creatividad infinita. Una misma base de caldo (ya sea de estilo Chintan o Paitan) puede convertirse en infinidad de cuencos simplemente cambiando el tare. Esa flexibilidad permite a los maestros del ramen explorar nuevos matices y plasmar su propia visión. Y si además se incorporan toppings como el Chashu, las posibilidades son verdaderamente interminables
En casa, el tare brinda la misma libertad. Puedes jugar con distintos tares y caldos para crear tu versión de ramen. El tare te da el mando: ajusta sabores, súmalos o restalos a tu gusto.
El tare también es un elemento duradero del ramen: su contenido de sal permite conservarlo durante mucho tiempo, de modo que los chefs pueden elaborar grandes cantidades con antelación y dosificarlas cuando las necesiten.
Lo más importante, sin embargo, es que el tare encarna el arte del ramen. Su elaboración exige atención, precisión y conocimiento. Conlleva tiempo y esfuerzo, pero la recompensa es un sabor realmente irrepetible.
Si quieres comprender el ramen de verdad, empieza por el tare. Ahí late el corazón de este plato asombroso y allí descubrirás la esencia que lo convierte en una experiencia culinaria inolvidable.
El tare no es solo una salsa; es una filosofía, una forma de concebir la cocina que trasciende ingredientes y técnicas. Es la llave de la magia del ramen y sigue inspirando y cautivando a quienes aspiran a dominar este extraordinario arte.
1. La salinidad del Tare
El tare es el mago del ramen: es quien le otorga todo el carácter al caldo. Imagina que te pasas el día preparando un caldo y, al probarlo, resulta soso y plano. Desalentador, ¿cierto?
En el 99 % de los casos el problema es la falta de sal, y ahí entra en escena el tare. Sin sal, la sopa no funciona; es como un plato sin especias, le falta chispa.
Hay quien asegura que la sal debe suponer exactamente el 1,5 % del volumen del caldo, pero al final decides tú. ¿Te gusta un ramen potente? Añade más. ¿Lo prefieres suave? Pon menos. Al fin y al cabo es tu cuenco y tu paladar manda.
No te compliques con las teorías sobre variedades de sal o formas de cristal: el tare es líquido, así que nada de eso importa. ¿Que algunos locales presumen de usar cinco sales distintas? Marketing, poco más.
Lo esencial es recordar que la sal es vital para el ramen y que el tare es el vehículo para incorporarla. Ese pequeño extra marca toda la diferencia.
2. El sabor del Tare
El tare es decisivo para el sabor del ramen. Reúne ingredientes de perfil intenso y delicioso como el kombu (alga), los shiitake (setas), la salsa de soja o el miso. No pasan inadvertidos: son capaces de transformar un plato. Los tares son auténticas bombas de sabor.
Si ya has probado un tare, sabrás que su sabor es rico y complejo, y eso no es casual: está pensado al detalle.
Hay, sin embargo, un truco: si añades estos ingredientes al caldo desde el inicio y los cueces durante horas, parte de su sabor se disipará, igual que ocurre cuando tostamos demasiado las especias. Mantener el tare aparte preserva toda esa riqueza y te permite regular la intensidad a tu antojo.
Es un enfoque distinto al de muchas sopas occidentales, donde las especias se añaden al principio. En el ramen, el tare entra al final y por eso el sabor queda tan vibrante y definido.
3. El umami del Tare
El umami es ese gusto profundo y sabroso presente en ciertos alimentos, y el tare lo maneja como nadie. A continuación te cuento, de forma sencilla, cómo lo consigue:
- El ácido glutámico : responsable directo del umami. Abunda en alimentos como el parmesano, los tomates o las carnes a la parrilla. En el ramen proviene de la salsa de soja, el kombu (alga) y el miso. También puede añadirse el MSG, un ingrediente muy debatido pero común en Japón para acentuar el umami.
- Los nucleótidos sinérgicos : compuestos que actúan junto al ácido glutámico para intensificar el umami. No son artificiales; aparecen de forma natural en mariscos, pollo, tomates o setas. Funcionan como amplificadores de sabor.
En pocas palabras, el tare se apoya en ambos mecanismos para volver el ramen irresistible: parte de ingredientes ricos en umami y los combina para que el sabor suba de volumen, como cuando pones tu canción favorita un poco más alta.
Y esto no es nada nuevo. Los cocineros japoneses llevan siglos aplicando estas técnicas, aun sin conocer la ciencia detrás. Simplemente observaron que ciertas combinaciones resultaban deliciosas, como ocurre con los ingredientes que forman el Dashi
Los diferentes tipos de tare
Hay muchos tipos de tare, y el único límite es la imaginación. A continuación tienes una lista no exhaustiva:
Shoyu tare
- Ingredientes principales : salsa de soja (shoyu), mirin, sake, azúcar.
- Sabor : salado y ligeramente dulce, con una profunda nota umami.
- Uso : muy habitual en el ramen tradicional; aporta un tono marrón oscuro y un sabor intenso.
Shio Tare
- Ingredientes principales : sal, a menudo combinada con productos del mar como el kombu y el katsuobushi.
- Sabor : salado y ligero, por lo general más sutil que otros tares.
- Uso : ideal para caldos claros; realza los sabores delicados sin cubrirlos.
Miso Tare
- Ingredientes principales : miso (pasta de soja fermentada), a menudo mezclado con ajo, jengibre y otras especias.
- Sabor : rico y robusto, con un umami muy marcado.
- Uso : empleado en el ramen de miso; entrega un sabor complejo y reconfortante, perfecto para los días fríos.
Tantanmen Tare
- Ingredientes principales : aceite de sésamo, pasta de soja, pasta de chile, y a menudo cacahuetes o tahini. Deriva de los fideos dan dan chinos
- Sabor : picante y aromático, con un matiz a fruto seco.
- Uso : presente en el tantanmen ramen, una variante picante; aporta calor y complejidad extra.
Tares picantes
- Ingredientes principales : distintos tipos de chile, aceites picantes, a menudo mezclados con otras bases de tare.
- Sabor : picante y punzante, con niveles de calor variables.
- Uso : puede sumarse a cualquier ramen para darle chispa, o servir de base a un ramen explícitamente picante.