Esta receta está pensada especialmente para quienes no tienen necesariamente la suerte de vivir cerca de una tienda asiática.
Puedes optar por comprar tu salsa agridulce ya preparada o hacerla con mi receta de salsa agridulce, que honestamente es igual de sencilla.
Aunque tiene influencias claramente estadounidenses, los buñuelos agridulces tienen sus orígenes en China en el siglo XVIII, donde se preparaban más bien con cerdo.
Ingredientes de los buñuelos de tofu con salsa agridulce
Bien, empecemos por el principio: el tofu. Necesitas tofu extrafirme.
La congelación del tofu: un elemento esencial de la receta
Congelar el bloque de tofu extrafirme (no hace falta prensar el agua antes de congelar) es imprescindible, porque el agua dentro del tofu se dilata al congelarse y crea esas capas en el tofu que le dan una textura aún más “cárnica”. Es una técnica que me encanta utilizar en mis recetas vegetarianas por la textura y la consistencia extra que aporta.

El vinagre de arroz: es más o menos el único ingrediente “exótico” de la lista. Y aun así, ahora que el sushi está de moda, se encuentra muy fácilmente en los supermercados.
Consejos para conseguir un tofu agridulce crujiente
Ante todo, hay que esperar a que el aceite alcance la temperatura adecuada. Idealmente tienes un thermómetro de cocina; si no, puedes echar una pequeña gota de la masa de rebozado dentro.
Si chisporrotea y sube directamente a la superficie, está a la temperatura correcta. Si el aceite no está lo bastante caliente, la masa se despegará y los buñuelos no quedarán crujientes.
En la misma línea, no hay que añadir demasiados trozos de golpe al aceite. De lo contrario, podrías bajar la temperatura del aceite y acabar con las consecuencias mencionadas arriba. En resumen, ¡fríe en tandas!

Con la salsa, no hay problema en prepararla con antelación para no tener que coordinar todo en una superficie de cocción pequeña. Eso sí, asegúrate de calentarla antes de añadir los buñuelos.
¿Con qué acompañar los buñuelos de tofu agridulce?
Puedes simplemente servirlo como aperitivo. Pero si es el plato principal de una cena, el arroz blanco puede ser delicioso en toda su sencillez. Mezclado con la salsa, quedará riquísimo.
Como alternativa, puedo sugerir mi arroz frito, arroz cantonés o también mi arroz amarillo. ¿Y por qué no mi pollo al limón para tener una bonita dualidad de colores?

Si los invitados (o tú) no son fans del arroz, tengo una deliciosa receta de fideos salteados con verduras como en el restaurante. Honestamente, es una pasada y el sabor “salado” complementará de maravilla el tofu agridulce.

Equipo
Ingredientes
Salsa
- 100 g azúcar en polvo
- 60 g vinagre de arroz
- 60 g ketchup
- 2 cucharadas maicena
- 2 cucharadas agua
Rebozado
- 1 porción mi pan rallado universal
Marinada para el tofu
- 300 g tofu extrafirme congelado
- 3 cucharadas salsa de soja ligera
- 1 cucharada vino Shaoxing
Instrucciones
- Descongela el tofu en la nevera durante toda la noche (no lo presiones).
- Presiónalo ahora para extraer la mayor parte del agua.
- Desmenúzalo con cuidado en trozos pequeños; estará muy frágil.
- Ponlo en un bol junto con los ingredientes de la marinada y mezcla con suavidad.
- En otro bol, prepara el rebozado (mi receta de pan rallado universal).
- Calienta el aceite a 180 °C.
- Pasa cada trozo de tofu por el pan rallado y colócalo en el aceite caliente. Fríe una primera vez hasta que esté ligeramente dorado. Reserva 5 min y vuelve a freír hasta que quede dorado.
- Mezcla la salsa en un bol.
- En un wok, a fuego medio, añade la salsa y remueve sin parar hasta que espese.
- Reduce a fuego bajo, añade los buñuelos y mezcla con suavidad.