Una deliciosa receta de brochetas de pollo teriyaki, mejores que las del restaurante
No hay nada mejor para despedir el verano con estilo (y suavidad) que organizar una pequeña parrillada. A los fans del pollo teriyaki, la versión en brochetas les encantará. Así se empieza bien la vuelta: pollo tierno, jugoso y lleno de sabor para afrontar el regreso.
¿Qué son las brochetas Teriyaki?
El pollo Teriyaki es, sin lugar a dudas, un clásico de la cocina japonesa. El término describe un método de cocción que consiste en asar la carne y bañarla con un glaseado teriyaki. Con las brochetas sucede exactamente lo mismo.
La carne queda tierna y jugosa, y la salsa, que sirve tanto para marinar como para glasear, convierte el plato en algo único.
Ya sea que la viertas sobre sushis, temaki, platos de ternera o fideos, esta salsa siempre triunfa y, además, se prepara en un instante. Entonces, ¿por qué no aprovecharla en esta receta?
Consejos para lograr brochetas Teriyaki perfectas
Mas vale prevenir que lamentar. “No tengo jugo de piña, ¿y si uso trozos de piña?” Mas de uno se ha llevado una sorpresa al probar este método.
Puede parecer la solución, pero al día siguiente, si planeabas dejar las brochetas listas con antelación, te sorprenderás. Descubrirás con desilusión que no fuiste tú ni tus invitados quienes se comieron el pollo, sino la propia piña.
En pocas palabras, la piña contiene enzimas que “muerden” las proteínas. Es útil para eliminar microbios y los últimos residuos “parásitos”, pero menos cuando apenas queda plato.
Si insistes en usar trozos de piña en la preparación, añádelos en el último minuto. En cuanto al jugo de piña, el riesgo es menor y permite una marinada más lenta (pero no demasiado prolongada).
Los ingredientes principales de las brochetas Teriyaki
El pollo: un ingrediente que va de la mano con el teriyaki. Aquí no utilizamos la salsa teriyaki como tal; propongo una marinada exprés agridulce igual de eficaz.
Dejaremos que el pollo repose en la marinada con todos los ingredientes y, al final de la cocción, lo glasearemos con esa misma mezcla para darle un sabor caramelizado.
La salsa de soja: como la marinada es suave y bastante dulce, la salsa de soja (Kikkoman o salsa tamari) aporta la sal imprescindible. Simple cuestión de equilibrio.
El jugo de piña: en el mejor de los casos, usa uno sin azúcar añadido. La piña ya es dulce de por sí, y además incorporamos azúcar moreno; el objetivo es no desequilibrar la balanza.
El ajo: en abundancia. Junto con el jengibre, el ajo fresco añade ese matiz picante y aromático a la marinada.
Brochetas de Pollo Teriyaki
Equipo
Ingredientes
- 1.5 kg contramuslos de pollo deshuesados y cortados en trozos
- 240 ml salsa de soja japonesa como Kikkoman
- 240 ml jugo de piña idealmente sin azúcar añadido
- 240 ml azúcar moreno
- 5 dientes ajo picados
- Un poco de jengibre picado
Instrucciones
- Mezcla todos los ingredientes en un bol grande.
- Reserva aproximadamente un tercio de la marinada para usarla como glaseado durante la cocción.
- Deja marinar el pollo en la mezcla restante durante al menos 8 horas, idealmente toda la noche.
- 30 minutos antes de cocinar, remoja las brochetas en agua fría.
- Ensarta el pollo en las brochetas. Asegúrate de apretar bien los trozos de pollo entre sí.
- Cocina el pollo a fuego medio-bajo en la parrilla o en una sartén, dándole la vuelta con frecuencia para una cocción uniforme.
- Pincela regularmente con la marinada reservada hasta que el pollo esté bien caramelizado y cocido.