Cuando pensamos en kimchi, lo primero que viene a la mente es la célebre col napa o col china. Este gran repollo de forma ovalada es fundamental en la cocina coreana y china, y en la gastronomía asiática en general, y no solo por ser el ingrediente principal del kimchi. Acompáñame a descubrir su historia y sus múltiples usos.
Origen de la col china
Esta variedad de col se originó en China, concretamente en los alrededores de Pekín, y se ha extendido por todo el Este de Asia. Aunque en Occidente la solemos llamar col china, en Corea se conoce como baechu (배추).
La col napa, o baechu, no se parece en nada a un repollo convencional. Presenta una forma alargada y hojas verdes con largos tallos blancos. No se tiene la certeza de cómo adquirió esta forma, pero los científicos creen que surgió de la hibridación natural entre un nabo y un bok choy (este último, por cierto, es igualmente habitual en la cocina asiática).
¿Cómo elegir la col china?
El sabor de la col china es más delicado que el de la col verde occidental y sus hojas son mucho más crujientes. A finales de otoño seguramente verás col napa por todos lados en las tiendas de productos asiáticos. Esto se debe a que el final del otoño y el inicio del invierno son la época ideal para preparar kimchi.
Y sin col napa, resulta complicado hacer kimchi.
Si este año quieres prepararlo, esto es lo que debes buscar en tu col china:
Una col napa de calidad debe ser bien verde y frondosa, no completamente blanca, y no presentar defectos.
Asimismo, las hojas no deben ser demasiado finas, ya que indicaría que la col contiene mucha agua y tu kimchi podría quedar aguado. Cuando la compres, envuélvela en papel periódico, métela en una bolsa de plástico y guárdala en el refrigerador hasta 10 días. (Mi récord es de tres semanas; en serio se conservan muy bien)
¿Cómo usar la col china?
La col napa no solo sirve para hacer kimchi, sino que puede emplearse en infinidad de platos. Puedes preparar col jeon (tortitas), agregarla a una sopa para la resaca hecha con hueso de vacuno, o incorporarla a salteados como el yasai itame o, sencillamente, una col china salteada.
Por lo tanto, al añadir sal a la ensalada se liberará ese exceso de agua. Podemos utilizarla en un tsukemono para preparar una ensalada de col japonesa
También es importante enjuagarla a fondo antes de cocinarla, pues sus numerosas capas pueden acumular suciedad.
Muchos coreanos salan la col antes de lavarla y usarla, ya que así se elimina parte del exceso de humedad. Esto ayuda a que la col napa mantenga su crujido pese a todas las salsas incorporadas durante la preparación del kimchi.
El repollo es una verdura infravalorada que muchos pasan por alto. Si no te convence la col occidental tradicional, prueba la col china.
La diferencia es abismal. Es la col perfecta para infinidad de recetas y aporta un sabor suave y una textura crujiente simplemente deliciosa. No es casualidad que siga siendo tan apreciada en la cocina coreana, china y asiática en general. ¡Anímate a probarla! Te aseguro que no te decepcionará.
Calorías de la col china
La col china es muy baja en calorías: por cada 100 g aporta apenas 12 calorías. fuente