Los chow mein son una versión mejorada de los clásicos fideos salteados con verduras: más verduras, un toque extra de azúcar y, en general, mucho más sabor. Y no solo eso: esta receta es un auténtico cajón de sastre con el que vaciar tu nevera de esas verduras que ya piden salida.
¿Pero qué es el chow mein?
El chow mein es un plato tradicional chino elaborado con fideos de huevo y verduras salteadas. A mí me gusta añadir una proteína, y mi favorita es el pollo; pero también puedes probar con otras carnes o, si lo prefieres, con tofu.
Este plato se saltea para que los fideos queden bien fritos, casi crujientes, y luego se mezclan con una salsa deliciosa. El chow mein es perfecto para esas noches en las que no quieres ensuciar demasiadas ollas ni armar un gran desorden en la cocina.
El chow mein obtiene su sabor característico de una salsa casera, espesa y oscura, en la que se mezclan los fideos. Es el equilibrio perfecto entre lo dulce y lo salado y es absolutamente imposible soltar los palillos una vez lo pruebas.
Los ingredientes del chow mein
Fideos Chow Mein: Los fideos chow mein se elaboran con trigo y huevo. Se parecen mucho a la pasta italiana y ofrecen una textura en boca maravillosa. La mayoría de las tiendas de alimentación chinas los venden en formato seco.
Con un poco de suerte, los encontrarás ya precocidos en la sección refrigerada, listos para ir directamente a la sartén.
Verduras: las zanahorias, la col, las cebolletas y los brotes de soja forman la combinación ideal para el chow mein. Sin embargo, puedes sustituirlas fácilmente por bok choy, apio, brócoli, espinacas, col rizada o maíz tierno.
¡No dudes en ser creativo y usar lo que tengas a mano en la nevera! Esta receta es perfecta para darle salida a todo.
Salsa de soja dark: no la confundas con la salsa de soja light; lo normal es que tengas que recurrir a Amazon o a una tienda asiática para conseguirla.
Salsa de ostras: tranquilo, no sabe a ostra y, sí, es imprescindible 🙂 Descubre sus secretos aquí
Vino Shaoxing: pieza clave de la salsa, este vino chino aporta un sabor único al plato.
Aceite de sésamo: el aceite asiático por excelencia. No te pases con la cantidad, pero disfruta de su sabor suave y a la vez potente. Descubre sus secretos aquí
La MEJOR salsa para fideos
La salsa casera de chow mein es una maravilla en esta receta. Combina salsa de soja, aceite de sésamo, salsa de ostras, azúcar granulada, fécula de maíz y caldo de pollo para lograr ese equilibrio dulce y salado que le da al chow mein su sabor auténtico y súper adictivo.
Inspiración: Joshua Weissman, a su vez inspirado por The Woks of Life.
Chow Mein (fideos salteados chinos)
Ingredientes
SALSA
- 15 ml vino de Shaoxing
- 35 ml salsa de soja oscura
- 4 g pimienta blanca molida
- 27 g salsa de ostras
- 5 g aceite de sésamo
- 1 cucharada agua (o caldo de pollo)
- 5 g maicena
- 1 cucharada azúcar en polvo
FIDEOS
- 300 g fideos chinos (peso en seco)
- 2 tallos cebollines, en trozos de 1 cm
- 2 tallos apio, en rodajas finas
- 1 zanahoria pelada y en rodajas
- 0.5 col china, cortada muy fina (casi rallada)
- 6 dientes dientes de ajo picados
- 120 g brotes de soja
Instrucciones
- En un bol, mezcle todos los ingredientes de la salsa.
- Pase la mezcla a un cazo antiadherente pequeño y, a fuego alto, remueva sin parar hasta que la salsa espese ligeramente. Reserve.
- Caliente una sartén amplia a fuego alto con un chorrito de aceite.
- Añada el apio, la zanahoria, los cebollines y la col. Saltee unos 3 minutos y páselo a un bol.
- Añada un poco más de aceite y 3/4 del ajo picado. Cuando empiece a dorarse, incorpore de nuevo las verduras junto con los fideos y saltee 1 minuto.
- Vierta la salsa, saltee 30 segundos, añada los brotes de soja y saltee 30 segundos más.
- Apague el fuego, añada el ajo restante y mezcle.
- Pruebe y ajuste de sal.
