El bubble tea, también llamado té boba, es una pequeña joya procedente de Taïwan que se presenta en infinidad de sabores y variantes. ¿Has visitado alguna barra de bubble tea? Son auténticos laberintos de delicias con un sinfín de combinaciones capaces de dejarte mareado.
Ya sea que te animes a preparar tu bubble tea en casa o que prefieras disfrutarlo tranquilamente en tu salón de té favorito, una cosa es segura: vas a darte un festín.
Prepárate para adentrarte en el sabroso y sorprendente mundo del bubble tea, con todas las combinaciones de sabores y texturas que puede ofrecerte.
¿Qué es el bubble tea?
Conocido también como té boba, té de perlas o té de tapioca, esta bebida nació en Taiwán en los años 80. Allí causó furor y, ¿adivina qué? ¡Ha conquistado el planeta! De Nueva York a Madrid, los bares de bubble tea proliferan por doquier.

El bubble tea es todo un cóctel de sabores y texturas: té infusionado, leche (o su versión vegetal, si lo prefieres), un toque aromático, azúcar o edulcorante y, por supuesto, la estrella del espectáculo: las perles de tapioca o su equivalente.
Se agita bien con hielo, se sirve con una pajita XXL y, ¡listo! Tu bubble tea está preparado para disfrutarlo.
Tipos de bubble tea
Hay cientos de variantes, pero podemos agruparlas en cuatro grandes categorías:
- Thé au lait: Una combinación sencilla de thé noir con leche y perlas de tapioca
- Thé thailandais: Un té negro muy concentrado mezclado con leche condensada y perlas de tapioca
- Bubble tea au taro: Se mezcla pasta de taro —ese tubérculo de tono violeta y dulzura exquisita—
- Thé aux fruits: Un té de frutas acompañado de burbujas, casi siempre también frutales

Tipos de té para el bubble tea
Al pedir o preparar un bubble tea, la decisión más importante es, por supuesto, el tipo de té que utilizarás. Aquí destacamos cuatro variedades principales:
- Thé noir: También conocido como té rojo en China, Taiwán y Hong Kong, es una de las opciones más populares para el bubble tea (¡y mi favorita!).
- Thé vert Ya sea thé vert jasmin o matcha, resulta delicioso
- Thé oolong: El oolong vert es especialmente apreciado, aunque el oolong tradicional tampoco se queda atrás.
- Thé blanc Muy popular en Occidente, pero poco usado en Asia.
Con la popularidad del bubble tea han aparecido mezclas que ni siquiera llevan té. Entre ellas, el “Snow Ice” (una bebida helada a base de café soluble batido), las versiones cremosas o las elaboradas exclusivamente con fruta.
Tipos de leche para el bubble tea
Se acostumbra añadir leche u otros sustitutos para lograr una textura cremosa y un sabor suave. Estos son los más habituales:
- Leche fresca
- Leche condensada
- Leche de coco
- Leche de soja
- Leche sin lactosa
- Leche de avena
Algunos bubble teas con frutas ácidas se ofrecen solo sin leche, ya que la acidez del sirope puede cortarla.
Los distintos sabores de bubble tea
El bubble tea es un lienzo en blanco listo para llenarse de sabor. Los ingredientes básicos son té, leche y boba, pero la auténtica magia está en los aromatizantes, ya sean jarabes o polvos.
Imagínate la fila de botellas de sirope en una cafetería, listas para transformar tu latte. En las tiendas de bubble tea ocurre lo mismo, pero con aún más opciones. Los jarabes aromatizados sencillos triunfan porque se integran fácilmente en el té con leche frío.
¿Eres más del equipo afrutado? Aquí tienes algunas opciones: melón dulce, lichi, mango, maracuyá, durazno, ciruela, fresa, aguacate, plátano, melón cantalupo, coco, uva, manzana verde, yaca, kiwi, limón, piña, sandía.

Si prefieres algo menos afrutado, ¡no hay problema! Prueba almendra, café, jengibre, pastas de sabor (chocolate, natilla, mango, haricots rouges, haricots mungo, taro, sésame o ube —en forma de ube halaya—), cebada, caramelo, chocolate, lavanda, moka, rosa… ¡hay para todos los gustos!
Tipos de boba (perlas de bubble tea) y otras adiciones

El bubble tea es, en esencia, un cóctel de texturas. Al principio, la “burbuja” hacía alusión a las burbujas de aire que aparecían al agitar enérgicamente el té con la leche.
Hoy el término describe las “perlas”, la “boba” y demás golosinas que se añaden a la bebida. Estas creaciones suelen tener lo que en Taiwán y China se llama textura «QQ».
«QQ» define una textura masticable que causa furor en la cocina taiwanesa y china. Los alimentos con textura «QQ» no necesitan ser muy sabrosos para triunfar —de hecho, rara vez lo son—. Estos son algunos tipos de “burbujas” de moda:
- Perles de tapioca : Pequeñas bolitas de fécula de tapioca hervida que ofrecen una textura súper masticable, casi como chicle, y prácticamente carecen de sabor. Suelen ser de color violeta oscuro o negro, aunque también las hay blancas o en tonos pastel. Son, con diferencia, las más populares y pueden variar de tamaño.
- Gelée : La gelatina de hierba se elabora a partir de mesona china; sus cubos masticables tienen un sabor ligeramente dulce y herbáceo. La gelatina de aloe es similar, pero se prepara con la planta de aloe. A veces se ofrecen otras gelatinas saborizadas, como la de coco.
- Boules de taro : Cocidas y, a menudo, de color violeta, estas bolitas dulces se elaboran a partir de la plante de taro.
- Boules de patate douce : Bolitas masticables elaboradas con batata naranja.
- Nouilles de tapioca : Por lo general se preparan con tapioca blanca y se moldean en finas tiras, similares a fideos, que se pueden sorber con una pajita ancha de bubble tea.
- Boba qui éclate : Una variante de las perlas de tapioca que “estallan” en la boca, liberando todo su sabor. Se ofrecen en una amplia gama de sabores frutales.
Y, para coronar tu bebida, estos son algunos toppings y mezclas muy populares:
- Fruits frais : La fruta fresca troceada es muy apreciada, especialmente en los tés de frutas.
- Haricot rouge : Alubias rojas dulces y cremosas.
- Miettes de biscuit : Oreos trituradas u otras galletas similares.
- Glace : Algunas tiendas ofrecen helado como mezcla o topping para el bubble tea.