¿Qué son los hongos enoki?
El enoki es un curioso hongo blanco con una pequeña cabeza sobre un pie largo. Por aquí se le conoce mejor como “colibia de pie aterciopelado”. Originario de Japón, suele crecer en ramilletes sobre los tocones de los árboles durante todo el invierno.
En estado silvestre pueden presentar varios colores. Los ejemplares blancos que usamos en la cocina suelen cultivarse protegidos de la luz, en un entorno rico en CO2.
Además de resultar decorativo, la “aguja dorada”, o el “hongo de invierno” como también se le llama, se distingue de otras variedades de hongos por sus sabores singulares. ¡En China y en Japón lo saben muy bien! Es muy apreciado en la cocina tradicional, donde se utiliza en sopas, salteados e incluso ensaladas.
Origen de los hongos enoki
Estos hongos se hallan sobre todo en Asia Oriental y Norteamérica, pero fue en Japón donde empezaron a cultivarse hace varios siglos. En Asia se valoran especialmente por su riqueza en nutrientes, minerales y vitaminas.
El enoki es sin duda un alimento repleto de beneficios para la salud. En los últimos años su popularidad se ha extendido por todo el mundo, hasta el punto de encontrarse incluso en nuestros supermercados.
¿Cómo cocinar con hongos enoki?
Los enoki se cocinan muy rápido. Al ser más finos y delicados que la mayoría de las setas que conocemos, basta con dos minutos de cocción para lograr una textura crujiente. Y si busca lo mejor de lo mejor, los enoki fritos resultan deliciosos.
Si los prefiere más tiernos, deberá cocinarlos durante más tiempo. Recorte primero la base del racimo y separe los tallos para garantizar una cocción homogénea. Luego le aconsejo lavarlos en un cuenco con agua fría. No dude en repetir el proceso para eliminar al máximo la suciedad.
La mejor forma de preparar los hongos enoki sigue siendo como guarnición que realce su plato principal. Puede saltearlos durante un minuto a fuego medio o alto en una sartén con grasa, ya sea aceite de cacahuete refinado o de canola. Remueva constantemente la preparación antes de añadir la chalota y el ajo picados. Deje cocinar 30 segundos más y sazone con un chorrito de salsa de soja.
Hay muchas formas de preparar estos hongos. Quedan perfectos en un bol de ramen o de pho, donde el caldo caliente les aporta una textura tierna. En Japón incluso se utilizan para hacer helado: el hongo debe hervirse durante 30 minutos y luego congelarse en cubiteras.
Se utiliza sobre todo en tés, sopas o currys. Otro uso muy popular en los países asiáticos es el nametake. Es un plato agridulce con sabores umami (uno de los cinco sabores según los japoneses, que describe un sabor “carnoso y salado”, intensificando las sensaciones).
Para prepararlo, los hongos enoki se cuecen en una mezcla de mirin, salsa de soja y vino de arroz dulce, y se conservan durante dos semanas. Es un condimento que combina de maravilla con sus sopas, ensaladas, salteados, guisos, platos de fideos o de arroz.
¿A qué saben los hongos enoki?
Los hongos enoki son delicados y perfuman sus platos con notas de avellana y afrutadas. No dude en explorar las texturas; desde tiernas y fundentes hasta crujientes e intensas, son sensaciones que también pueden resultar muy interesantes en el plato. Gracias a su sabor suave y ligeramente dulce, estos hongos combinan muy bien con la citronela, el jengibre, las algas o la salsa de soja.
¿Dónde comprar hongos enoki?
En los últimos años los enoki se han popularizado y algunos supermercados, como Delhaize, ya los ofrecen. Si no logra encontrarlos, las tiendas de alimentación asiática casi siempre los tienen. Aun así, sea cuidadoso al comprarlos. Suelen venir empaquetados, por lo que la frescura no siempre está garantizada. Elija los ejemplares más blancos y firmes.
¿Cómo conservar los hongos enoki?
Olvídese del envase de plástico: no es la forma más adecuada de conservar sus hongos. Es preferible guardarlos en una bolsa de papel. Podrá mantenerlos en su refrigerador durante un máximo de 7 días. No obstante, vigile la humedad del frigorífico, ya que podría estropearlos.