Remoja los frijoles en agua durante 1 hora; luego enjuágalos y escúrrelos.
Con un tenedor, machaca los frijoles fermentados hasta obtener un puré y resérvalo.
Calienta el aceite en una cacerola pequeña a fuego medio-alto.
Añade el ajo y el jengibre; sofríe 1–2 minutos hasta que se ablanden y desprendan su aroma. Incorpora los cebollines y cocina 1 minuto más.
Agrega el puré de frijoles y cocina 1 minuto adicional.
Vierte el resto de los ingredientes, salvo la mezcla de maicena, y lleva a ebullición.
Reduce a fuego medio y cocina destapado 10-12 minutos, o hasta que el líquido se reduzca a la mitad.
Incorpora la mezcla de maicena y deja hervir 1 minuto más, hasta que espese.
Deja enfriar la salsa y guárdala en un recipiente hermético, preferentemente de vidrio.
Notas
Se conserva en la nevera hasta 2 semanas.
Para un plus de sabor, añade 1/2 cucharadita de ralladura de naranja junto con el caldo y continúa la cocción.